Hemos querido a través de esta página, rendir homenaje a nuestro padre, Thomas Owens.
Amaba la medicina, su profesión, pero tenía múltiples intereses, que lo hacían muy parecido a un hombre renacentista: igual conversaba sobre música clásica que sobre pintura impresionista o literatura barroca, comandaba una lancha de motor, trabajaba en carpintería o producía un esmerado trabajo de albañil. También tocaba la harmónica a la que llamaba la dulzaina.
A pesar sus largas horas de trabajo, siempre encontraba tiempo para compartir… tanto viajes a Costa Rica, como a esquiar al Lago Madden, a la isla en el Canal de Panamá, a Taboga o a Punta Chame. En sus últimos años nos acompañaba a la liga de bolos o a los juegos de voleyball en el Club Unión, nos juntábamos en algún viaje o crucero. Su mayor alegriía estaba en compartir momentos sencillos siempre en familia, con su querida Cris y con sus hijos o nietos.
Su amor por su familia, por la medicina, por la educación han quedado de manifiesto a través de los cientos de artículos que escribió, en la revista Lotería, en periódicos locales y en innumerables otras publicaciones.
Sus archivos muestran la seriedad con que preparaba todos sus escritos. Nítidamente organizados, en ellos se encontraban los borradores, las fuentes y las publicaciones de sus artículos y en algunos casos, hasta los diskettes en los cuales se encontraba la información.
Esperamos que los lectores de esta página encuentren en ella una forma de conocer más sobre los temas médicos que tanto le interesaban; sobre la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá de la que se sentía orgulloso de formar parte y a la cual dedicó gran parte de su vida, y sobre los grandes médicos que fueron sus profesores.
Su esposa Cris.
Sus hijos, Tomás, Patricia, Jaime, Ramsés y Carlos
Octubre de 2009